Por fin tenemos ante nosotros el nuevo trabajo de estos jinetes del rock, a estos hermanos-no hermanos, a este dúo que en un año a copado todas las portadas de las revistas especializadas de medio planeta. Por fin llega "Get Behind Me Satan", otro disco demoledor del dúo formado por Jack y Meg White, The White Stripes. "Elephant" fue el disco que les catapultó al estrellato, que les mantuvo en boca de todos convirtiéndose en héroes por accidente, por eso este disco se presentaba como un reto, el reto de mantenerse en el estrellato, por eso se apresuraron a incluir nuevos elementos.
Con "Get Behind Me Satan", la banda de Detroit sigue por los derroteros del rock contundente, de las guitarras puntiagudas y las percusiones potentes, son solo dos, pero suenan como un ejército. A partir de aquí les va a ser más costoso seguir sonando diferentes, aunque el séquito de seguidores acérrimos ya lo tienen más que superado, por lo que no va a suponer una traba mantenerse en lo más alto del podio del indie-rock actual.
"Get Behind Me Satan" sigue sonando a White Stripes, a lo largo de este tiempo, han sabido elegir el camino exacto de como querían que fuera su estilo, su actitud, quizás de ahí un poco el juego de decir que les unía una relación parietal. Rock directo, sin florituras, con ciertas dosis folkys, aunque en esta ocasión el protagonismo lo adquiera un furtivo piano como toque distintivo. Siguen sonando a banda de garaje de los sesenta, de filosofía punk y estética curada. De todos modos, dejando a un lado su aspecto bluesero, en este álbum Jack y Meg han tratado de introducir elementos más líricos a su propuesta, contando con la aparición tanto de ese piano, como de guitarras acústicas, marimbas u otros instrumentos a los que no nos tenían acostumbrados.
El nuevo álbum está formado por trece temas, entre los que destacan tonos de cierto ánimo, como ocurre con "Blue Orchid" que ha servido como single presentación del disco, video incluido, y que abre el disco de forma demoledora. Entre otros como "The Nurse", bizarra mezcla entre instrumentos, que nos augura una portada de estética folklorica española, obra de Ewen Spencer. Otros temas destacables son "Forever for her (is over me)", balada donde las teclas de ese piano acompañan a la voz de Jack. Esperemos que el tiempo les de la razón, cualidades no les faltan.